El Ministerio ha confiado a las Comunidades Autónomas la responsabilidad de establecer mecanismos de control de obra. En ANDIMAT abogamos, en cambio, desde hace años, por el seguro trienal obligatorio, a través del cual se crea una herramienta de control para garantizar el cumplimiento los requisitos de Código Técnico de la Edificación (CTE).
La obligatoriedad del seguro trienal, que incluye la Ley de Ordenación de la Edificación (LOE) pero con carácter voluntario, cubriría los requisitos de habitabilidad del edificio (como el aislamiento y la impermeabilización) durante los primeros tres años, aportando seguridad al usuario y a todos los agentes que intervienen en la edificación.
En la actualidad el seguro trienal se puede contratar como garantía adicional al seguro decenal, pero su carácter voluntario merma las coberturas de la póliza y, en consecuencia, las garantías que proporciona respecto a las prestaciones esperadas de cubiertas, fachadas e instalaciones del edificio.
Si bien algunas Comunidades Autónomas ya tienen procedimientos de control para garantizar el cumplimiento normativo, en Andimat demandamos la emisión obligatoria de un informe de verificación realizado por una tercera parte independiente que acredite el cumplimiento de los requisitos técnicos de las ayudas a la rehabilitación. Apostamos por que se generalice a nivel nacional en aras a una mejor calidad arquitectónica y, fundamentalmente, como garantía al ciudadano.